Marchesini: «Esta final va a quedar en la historia, como la de Madrid»

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Matías Marchesini ya no es el director técnico del Club Central Larroque. Cuestiones de la vida personal hicieron que el ex jugador de Boca Juniors, Independiente, Los Andes y Juventud Unida de Gualeguaychú, entre otros, tomara la decisión de no continuar con su carrera un tiempo antes de la consagración del domingo.

Un hombre de convicciones firmes, que ni el éxito las hizo cambiar. Hoy para él es tiempo de objetivos nuevos, fuera del fútbol.

Los caminos de Marchesini y Central Larroque toman rumbos diferentes a partir de ahora, aunque es difícil pensar que algún día no vuelvan a cruzarse.

Fueron seis meses, los últimos de su carrera, como jugador del rojo y tres años al frente del equipo como conductor táctico y estratégico. En esta charla con el Departamento de Prensa de la Federación Entrerriana de fútbol repasamos emociones, vivencias y sensaciones tras coronarse como el mejor equipo de la Provincia.

– Cuáles fueron tus sensaciones tras la obtención de la Copa?

– Sensaciones muy lindas todas, muy difícil de explicarlas con palabras. Los que se vivieron a lo largo de todo el torneo fueron momentos felices. Ni hablar de la manera cómo se ganó la final. Sigo sin encontrar las palabras para describir algo semejante. Felicidad plena sería el concepto.

-Teniendo en cuenta que estuvieron dos veces abajo en el marcador por dos goles de diferencia, en algún momento de la final pensaste que no se les daba?

– Siempre tuve la fe intacta porque en el desarrollo del juego siempre nos mantuvimos en partido. Además, lo que me dejaba tranquilo era la entereza anímica que mi equipo tenía después de haber perdido la primera final. No vi un equipo entregado, muy por el contrario: estaban enojados, heridos en el orgullo y con sed de revancha. Esa rebeldía de ellos me brindó confianza a mi, aún en los momentos desfavorables que se nos presentaron durante el juego.

– El objetivo del equipo era ir por el título o fue algo que se fue gestando con el transcurrir de la competencia?

– El objetivo siempre fue ser protagonistas. De hecho en estos tres años que estuve al frente del equipo siempre hemos peleado cosas importantes. Ganamos la Copa Gualeguaychú y el torneo local y en otras dos oportunidades fuimos subcampeones de la copa. En todo este tiempo preparamos al equipo con mentalidad ganadora y dentro de esos objetivos estaba este de ser campeones provinciales.

– En tu caso preferías enfrentar en la final a un rival conocido o hubieses elegido a otro equipo cuyo entrenador no conozca al tuyo?

– Yo en lo personal prefería enfrentar a un rival conocido. Y te agrego más: tampoco me preocupaba el hecho de definir como visitante. A lo largo del torneo el equipo tuvo muy buenos resultados fuera de casa y eso me dejaba tranquilo. Además, esto de enfrentar a Deportivo fue un plus especial para todos. Este grupo tiene un gran sentido de pertenencia con el Club, por eso era también poder ganarle al clásico rival y poder quedar en la historia. Salvando las distancias, esto va a ser recordado acá como a nivel continental fue la final de River a Boca en Madrid. El final que se dio tampoco tiene nada de casualidad, tiene que ver con qué rival estaba enfrente y no darse por vencidos justamente por eso.

– Qué análisis haces del torneo en general?

– El nivel de los equipos de la Copa fue muy bueno. Eso engrandece y le da más prestigio a la competencia. Obviamente hay ligas que están mejor que otras, con equipos jugando a otro nivel. En general hubo mucha paridad dentro de un nivel alto. Para mejorar a futuro podría mencionar solamente el estado de algunos campos de juegos, donde se hace muy difícil jugar y eso conspira justamente con ese nivel que mencionaba. Respecto de la organización no hay nada que reprochar, siempre estuvimos conformes. Es más, desde mi lugar aliento a la Federación a continuar y potenciar este tipo de certámenes, que no sólo permiten a los equipos jugar a otro nivel sino que también es una gran oportunidad para muchos jugadores de mostrarse y poder dar un paso hacia el profesionalismo.

– Hace cambiar algo este título con respecto a tu decisión de no seguir dirigiendo?

– No, la decisión ya estaba tomada de antemano y no hay nada “raro” en la misma. El resultado en esta Copa no cambia absolutamente nada. Los dirigentes ya sabían que una vez finalizado el torneo yo no seguiría. Es una etapa cumplida después de tres años muy intensos. Pero me voy tranquilo de dejar un equipo campeón, que era como yo quería dejarlo. Hay cuestiones de la vida personal de cada uno que por momentos prevalecen por sobre el fútbol y este es uno de esos momentos. Lo voy a seguir acompañando como hincha, ya que este fue mi primer club como entrenador, más allá de que también tengo una relación especial con casi todos los muchachos al haber sido compañero de ellos antes que entrenador. Todas esas cosas hacen que uno le tome un cariño especial a la institución.

– Qué le dirías al entrenador que te suceda en el cargo?

– Desearle lo mejor. Que venga tranquilo porque va a encontrar un equipo ganador, que sabe a lo que juega y se adapta a cualquier sistema. Hay mucho material para seguir creciendo. Y más allá del excelente plantel, también se va a encontrar con dirigentes que hacen las cosas muy bien. Quien me reemplace seguramente se va a sentir acompañado y apoyado para poder trabajar con tranquilidad.

– Con qué palabras te querés despedir Matías?

– Agradecer a mucha gente. Me voy ganador, como quise, con el equipo donde quería que esté y dándome grandes satisfacciones. La vida, el fútbol o el destino me dio la posibilidad de volcar mi experiencia adquirida en este grupo. A ellos les estoy agradecido, como así también a los dirigentes que apostaron por mi en su momento y que siempre me acompañaron. Ojalá que a la institución le vaya realmente muy bien. Es un club que va a seguir creciendo.

Fotografías: Silvina González.